Juan Correa-Providencia EP (por Pablo Villierezz)

El sonido acústicos de la percusión se une a lo sintético, llevando esta pieza hacia otro mundo pero quedando firmemente atada a éste, a lo natural, a lo biológico.

El EP debut de Juan Correa que salió por el sello Very Jazzed es una joya de diseño de sonido y composición con texturas sonoras. Cada pieza es como mirar tejidos Oaxaqueños, con una infinidad de instrumentos y sonidos entrelazados que crean atmósferas deliciosas. Esta es una colección para viajar en todos los sentidos. El movimiento está implícito en cada pieza, pero son la mente y los sueños los que terminan trasladándose más en este proyecto hipnagógico. Mezclado por Andrés Oddone en Bugambilia Estudio, esta colección se disfruta de principio a fin.
“Providencia”, la primera canción del EP del mismo nombre, es como un génesis: la creación de un mundo sonoro que proviene del mar, sonidos extensos como listones o bocanadas de vapor en un día frío. Chelos y violines sintéticos adornan este paisaje sonoro cuyos acentos electrónicos, cristales vibrando, insectos charlando en latas, frecuencias, partículas desquebrajándose, abren finalmente un espacio rítmico, tranquilo y meditativo. Percusiones de mano, bajos dulces y reconfortantes, un despertar en la playa, un café al atardecer, un triunfo personal en lo más alto que se esparce como un sueño o una memoria fugaz.
Ritmos hipnóticos caracterizan a “Puerto Viejo”, la siguiente canción. Un bajo sintético, medio gracioso, marca la danza al estilo ambient que hace referencia al Bonobo de “Days to Come”, o a esas piezas de Aphex Twin de los “Selected Ambient Works”, donde percusiones se cruzan con sintetizadores. Una línea de trompeta, guitarras acústicas, marimbas rítmicas y drones electrónicos van creando texturas hasta alcanzar el clímax, rompiendo en un ritmo con sabor a dub house, medio funky, y sin duda agradable. Melodías van y vienen dentro de un espacio imaginario, creando nubes melódicas donde el kick finalmente triunfa.
La guitarra rítmica rompe el drone nebuloso con el que abre “La Colmena”. Finalmente las cuerdas se tornan más claras y la voz aparece dentro de este mundo de texturas con un tono amigable, natural y honesto. Marimbas, acordeones y niños bailan en esta pieza. Efectos de delay creando nubes sonoras que me hacen recordar a Fila Brazillia. Plantea un mundo de reflexiones y viajes internos.
Diferente a las demás composiciones, “Lluvia en Sinaloa” es una pieza para bailar al estilo downtempo, tropical y medio housero; con un pie en el chillout y el otro en el tecno hipnótico. Las flautas forman gran parte del ambiente sonoro, pero entrelazándose bien con los demás instrumentos y percusiones, siguiendo un estilo más rítmico que melódico, que sin embargo se encuentra perfectamente balanceado en esta combinación de instrumentos acústicos y electrónicos, que me recuerda un poco a Royksopp en “Melody A.M.”.
“Si Cae un Árbol” cierra este excelente debut con un ritmo infeccioso que marca el clásico tresillo latino con el kick y bajo. Pero la atmósfera está marcada por texturas e instrumentos que alivian, y si bien las melodías son experimentales, crean un ambiente que invita, como una caminata por el bosque en la noche. Los sonidos acústicos de las percusiones de mano crean familiaridad entre los sonidos sintéticos, llevando esta pieza hacia otro mundo, pero quedando firmemente atada a éste, a lo natural, a lo biológico y humano (por Pablo Villierezz)

También te puede interesar…

Suscripción a Newsletter

Por favor desactiva tu AdBlock para navegar en K7BLOG