Justo en este momento tremendo de la historia, en el que las corporaciones están ejerciendo terrible presión para que la gente deje de copiar, replicar y compartir información, nos encontramos con un invento increíble, que está siendo utilizado por muchos amigos del open-source. Imagina que ahora no solo puedes copiar en tu propia casa una canción, un libro o una película… ahora también puedes COPIAR OBJETOS. Por un lado, encontramos a la RepRap, una impresora 3D cuya habilidad más hermosa e increíble es que se puede replicarse a si misma en un 50%, es decir que cuando ya tiene la tuya el 50% de la impresora puedes imprimírsela (fabricarla físicamente, de enserio!) a un amigo para que el también pueda compartirla con otros amigos, en una cadena interminable. Luego solo te queda conseguir las partes restantes.
Además de esto, los modelos 3D están siendo compartidos en comunidades open-source, es decir que hay gente que crea los modelos 3D de un juguete, por ejemplo, y los comparte online para que otras personas puedan “imprimirlo” físicamente en sus casas. ¡SIMPLEMENTE MARAVILLOSO! Aquí pueden bajar modelos 3d gratuitos.
Ahora bien. Las impresoras 3D no son una novedad en el planeta. Existen hace aproximadamente 30 años. Pero lo verdaderamente revolucionario de estas impresoras es que por primera vez las puedes tener en tu propio hogar. Una de las más recientes y efectivas se llama MakerBot, y un niño de solo 10 años nos explica como funciona.