Volvemos al ruedo en nuestro tira y afloje con el amigo Dick Verdult, alias Dick el Demasiado. Luego de un descanso, continuamos con este camino de palabras, conceptos, encuentros y desencuentros. Hemos cruzado ideas que aclaran, otras que abren un sin fin de probabilidades, que eso de una manera aclara, y de otra nos pierde en lo aleatorio. Hemos visto el todo como algo natural (que tanto nos cuesta). Lo finito y cotidiano como una cárcel de la que podemos, si queremos, escapar. Nos hemos dado de frente con los vericuetos de la estética, con las fronteras del prejuicio, con el decir, con el amor, con el fluir, con el dulce desvarío. Y todo esto sin adoctrinamientos, sino como jugando, dejándonos ir en encuentros, sensaciones y posibilidades. Hoy llegamos a nuestro volumen 17, y lo vital de la charla sigue latiendo.
Dick Verdult – PanópticoCassette: Parece que producir mensajes en facetas o capas te es una facilidad ¿Que opinas de eso? ¿Contar desde el laberinto es para vos una necesidad? ¿O abrís la puerta a la duda porque te parece que los mensajes lineales esconden mentiras? ¿O simplemente esta manera de decir es la que te sale?
Dick Verdult: Mira, Cassetteblog, a todo lo que me pones ahí te respondo: Si.
Si, me es una gran facilidad producir mensajes multifacéticos, con paradojas, doble sentidos, y un enfoque difuso; siempre que sea como una daga y que tenga un lado de fascinación y otro lado afilado.
Me parece que mensajes con una sola capa nomás son instrucciones, comandos, asumiciones fáciles. No me interesa apuntar a una salida y decir “ahí esta la salida”. Es redundante y mecánico. Esos mensajes son funcionales, si, pero no es lo que nos hace falta. Lo que se necesita son cosas que nos catapulten.
Y el laberinto no es un problema, es un juego. Un laberinto nace, difícil y atrofiado, en el gran esfuerzo artificial de hacer que todo coincida en las explicaciones. En el deseo de comprobar su verdad, el que lo quiere vender se crea su laberinto. Pero si no estas en busca de una verdad mono-roca podes percibir las diferentes facetas como un juego, y no una fuente de confusión. El Laberinto comprueba la imposibilidad de la sola y única versión del todo. Por eso esta bueno poner eso sobre la mesa y decir: acérquense, miren esto, ¡nos vamos a divertir!
Si, los mensajes lineales sirven, pero sirven a una sola causa. “Queremos que nos crean, pues le diremos esto”. La duda es una cosa sana. Una persona con duda pueda que no funcione bien, que rinda menos. Pero también se mantiene cerca de una puerta de sorpresas y novedades. El que no tiene dudas es un peligroso, y el que tiene muchas quizás ya casi es nada. Una vez me invente una santa, Santa Duda, pero resulta que existe en Cataluña.
Obvio que con tanta convicción, esta manera de funcionar como bomba de fragmentación me sale automáticamente. A nadie le venderé unos uni…versos.
Cassette: ¿Que esconden estas estrellas de palabras?
Dick Verdult: Cada estrella creció con una razón muy orgánica. Yo había hecho en el 86 un librito con círculos de mis intereses. Luego, anduve dándole ramas con descripciones de los capítulos que conocía dentro de esos terrenos de mi interés. Por fin, al ver todo en su totalidad, me di cuenta que era un engranaje. Más aun, era una predisposición al baile, ya que si gira una de las estrellas giran todas. Como en los bailes populares de campo que tienen todas esa misma coreografía: las parejas giran sobre su propio eje, y el conjunto de todas las parejas también.
Por eso, este trabajo se llama: “la perspectiva panóptica (trad. todos los ángulos visibles) gira y gira”. Me gustan los saltos de perspectiva, es lo mejor que le puede pasar a uno para poder convivir. Y en el baile popular descrito, si el que participa se fija en su pareja por enamoro o por cuidado, lo que se encuentra detrás de su pareja, el fondo, apenas percibido, gira y gira.
Cassette: El mostrar ideas por medio de objetos artísticos (como este) ¿Es un acto de amor? ¿O es una catarsis del artista que sin querer rebota en los otros?
Dick Verdult: Yo creo que hay muchas variantes, tantas como artistas. Yo, en mi caso lo veo así: intento hacerlo bien, y en eso si es amor. Pero maleo el barro con un placer primitivo. Y si vos mismo estas lleno de ideas ya tan maduras que se plasman de por si al salir escupidas, pues entonces te sale fácil y con placer. Y como no refleja un sobre-esfuerzo, un calambre-del-crear, la gente siente eso, quiere acercarse y ver.
Y ver, ven, estas cosas son de Zinc y el total mide 10 metros de ancho.
Volvemos al ruedo en nuestro tira y afloje con el amigo Dick Verdult, alias Dick el Demasiado. Luego de un descanso, continuamos con este camino de palabras, conceptos, encuentros y desencuentros. Hemos cruzado ideas que aclaran, otras que abren un sin fin de probabilidades, que eso de una manera aclara, y de otra nos pierde en lo aleatorio. Hemos visto el todo como algo natural (que tanto nos cuesta). Lo finito y cotidiano como una cárcel de la que podemos, si queremos, escapar. Nos hemos dado de frente con los vericuetos de la estética, con las fronteras del prejuicio, con el decir, con el amor, con el fluir, con el dulce desvarío. Y todo esto sin adoctrinamientos, sino como jugando, dejándonos ir en encuentros, sensaciones y posibilidades. Hoy llegamos a nuestro volumen 17, y lo vital de la charla sigue latiendo.
Dick Verdult – Panóptico
Cassette: Parece que producir mensajes en facetas o capas te es una facilidad ¿Que opinas de eso? ¿Contar desde el laberinto es para vos una necesidad? ¿O abrís la puerta a la duda porque te parece que los mensajes lineales esconden mentiras? ¿O simplemente esta manera de decir es la que te sale?
Dick Verdult: Mira, Cassetteblog, a todo lo que me pones ahí te respondo: Si.
Si, me es una gran facilidad producir mensajes multifacéticos, con paradojas, doble sentidos, y un enfoque difuso; siempre que sea como una daga y que tenga un lado de fascinación y otro lado afilado.
Me parece que mensajes con una sola capa nomás son instrucciones, comandos, asumiciones fáciles. No me interesa apuntar a una salida y decir “ahí esta la salida”. Es redundante y mecánico. Esos mensajes son funcionales, si, pero no es lo que nos hace falta. Lo que se necesita son cosas que nos catapulten.
Y el laberinto no es un problema, es un juego. Un laberinto nace, difícil y atrofiado, en el gran esfuerzo artificial de hacer que todo coincida en las explicaciones. En el deseo de comprobar su verdad, el que lo quiere vender se crea su laberinto. Pero si no estas en busca de una verdad mono-roca podes percibir las diferentes facetas como un juego, y no una fuente de confusión. El Laberinto comprueba la imposibilidad de la sola y única versión del todo. Por eso esta bueno poner eso sobre la mesa y decir: acérquense, miren esto, ¡nos vamos a divertir!
Si, los mensajes lineales sirven, pero sirven a una sola causa. “Queremos que nos crean, pues le diremos esto”. La duda es una cosa sana. Una persona con duda pueda que no funcione bien, que rinda menos. Pero también se mantiene cerca de una puerta de sorpresas y novedades. El que no tiene dudas es un peligroso, y el que tiene muchas quizás ya casi es nada. Una vez me invente una santa, Santa Duda, pero resulta que existe en Cataluña.
Obvio que con tanta convicción, esta manera de funcionar como bomba de fragmentación me sale automáticamente. A nadie le venderé unos uni…versos.
Cassette: ¿Que esconden estas estrellas de palabras?
Dick Verdult: Cada estrella creció con una razón muy orgánica. Yo había hecho en el 86 un librito con círculos de mis intereses. Luego, anduve dándole ramas con descripciones de los capítulos que conocía dentro de esos terrenos de mi interés. Por fin, al ver todo en su totalidad, me di cuenta que era un engranaje. Más aun, era una predisposición al baile, ya que si gira una de las estrellas giran todas. Como en los bailes populares de campo que tienen todas esa misma coreografía: las parejas giran sobre su propio eje, y el conjunto de todas las parejas también.
Por eso, este trabajo se llama: “la perspectiva panóptica (trad. todos los ángulos visibles) gira y gira”. Me gustan los saltos de perspectiva, es lo mejor que le puede pasar a uno para poder convivir. Y en el baile popular descrito, si el que participa se fija en su pareja por enamoro o por cuidado, lo que se encuentra detrás de su pareja, el fondo, apenas percibido, gira y gira.
Cassette: El mostrar ideas por medio de objetos artísticos (como este) ¿Es un acto de amor? ¿O es una catarsis del artista que sin querer rebota en los otros?
Dick Verdult: Yo creo que hay muchas variantes, tantas como artistas. Yo, en mi caso lo veo así: intento hacerlo bien, y en eso si es amor. Pero maleo el barro con un placer primitivo. Y si vos mismo estas lleno de ideas ya tan maduras que se plasman de por si al salir escupidas, pues entonces te sale fácil y con placer. Y como no refleja un sobre-esfuerzo, un calambre-del-crear, la gente siente eso, quiere acercarse y ver.
Y ver, ven, estas cosas son de Zinc y el total mide 10 metros de ancho.
