La Gravedad de los asuntos – Entrevista a Juan José Díaz Infante (por Manuel Cosío)
En los dos últimos años, un considerable número de artistas mexicanos han iniciado proyectos relacionados con las ciencias espaciales, todo esto mientras México comienza una nueva etapa en la comunidad por medio de la recién fundada Agencia Espacial Mexicana (AEM)CassetteBlog visitó la exposición La Gravedad de los Asuntos, la cual se encuentra conformada por muestras de diferentes artistas que se sometieron a la experiencia de la ingravidez en un avión militar Ruso. En ella se apunta a temas fundamentales de lo humano, tomando las implicaciones culturales y científicas del concepto de la gravedad. La exposición hace interesantes planteamientos de la relación con objetos y sentimientos cotidianos a través de la gravedad o la falta de ella; desde relojes de arena, los efectos en el cuerpo, el deseo de volar, el abrazar a otra persona cuando no percibes su peso, hasta la gravedad expresada en la atracción entre los cuerpos y la poesía, estos son algunos de los temas presentes a lo largo del recorrido. Tuvimos la oportunidad de hablar con Juan José Diaz Infante, artista participe de la muestra y amigo de la crew de Cassette blog para que nos contará un poco del proyecto.
– Cassette: Juan José ha lo largo de muchos proyectos has encontrado un punto de equilibrio entre el arte y la ciencia, ahora con “La gravedad de los asuntos”, formas parte de este grupo de artistas que exploran desde otra cara la gravedad, qué nos puedes comentar al respecto:
– Juan José: La exposición se llama “Gravedad de los asuntos” y es una manera de entrar con sentido del humor; una frase coloquial, pero en realidad el proyecto tiene que ver con una misión de gravedad cero hecha por artistas y es una referencia de misiones de gravedad cero hechos previamente en Europa.
– Cassette: ¿Qué tanto les influenciaron o los sirvieron de guía estos referentes?
– Juan José: Bueno lo que pasa es que son distintos tiempos y distintos momentos, es distinto cuando lo planeas un proyecto ahí a los procesos de México, que viéndolo, es el primero que se hace en Latinoamerica, es un momento de hacerlo en base a que hoy en día hay mucho más accesibilidad a este tipo de vuelos.
– Cassette: ¿Qué es lo que buscan lograr en el espectador con “La gravedad de los asuntos”?
– Juan José: Tiene que ser una reflexión sobre la fuerza de gravedad, que es una de las fuerzas que están mal entendidas y que aún se debate su existencia, de alguna manera lo que se busca es un ángulo distinto, una manera distinta de ver la gravedad como fuerza, es un ente que se escucha desde el arte, que se vea, básicamente no es que se sienta o no, es un ángulo distinto de observación de un fenómeno llamado gravedad.
– Cassette: ¿Cuál fue el principal detonante de Juan José para estar en este proyecto?
– Juan José: Yo con anterioridad he trabajado con relación al espacio y el arte, son temas que me apasionan, ahí conocí a Nahum, encontramos que teníamos intereses similares y es ahí en donde con el camino andado vimos la posibilidad de colaborar.
– Cassette: ¿Para ti eso que llamamos Gravedad, que está presente siempre en la vida cotidiana humana, ahora que tienes un referente de su ausencia, cómo crees que afecta a los seres humanos en sus diferentes facetas y emociones?
– Juan José: Lo que pasa es que la gravedad nos mantiene pegamos a un cuerpo celeste llamado tierra que gira a 10,000 km/s, o más bien cae, está en caída libre, y básicamente la gravedad es la razón por la que no salimos disparados al espacio, de esa manera es lo que nos permite estar pegados al planeta que crea nuestra forma de ser. En un ambiente donde no hay gravedad no necesitas una silla, nosotros, todos los eres humanos necesitamos el concepto silla para existir, el concepto cama con gravedad es distinto al concepto no cama, pues básicamente el poder percibir o poder saber de lo que se trata la gravedad o la ausencia, hace que tengamos una cosmovisión y que sepas que es lo que te está pasando a ti y que es lo que le está pasando a la tierra y pues la visualización es distinta de otra era, en donde al llegar al final de la tierra te caes a un vacío, a establecer que vas cayendo con la tierra, eso te pone a pensar si hay un destino final de la tierra, es decir si estamos cayendo a algún lado, cuál es nuestro punto alfa y cuál es nuestro punto omega y si estamos cayendo, ¿dentro de qué estamos cayendo?, entonces toda esa reflexión te hace más humilde, y te da el sentido de que somos unos viajeros involuntarios, estamos cayendo y estamos yendo en una distancia increíble hacia un lugar. En realidad la vida se podría narrar a manera de un diario de viaje.
Además pensemos en la luz, la gravedad afecta a la luz y atrae a la luz, la distorsiona en el espacio, hay relaciones que tienen que ver: espacio-tiempo, entender la relación y tratar de entender como la gravedad es una distorsión del espacio tiempo o es una fuerza de atracción entre dos cuerpo, a nivel Newtoniano la atracción de cuerpos grandes funciona bien pero para explicarla pero a nivel atómico, no aplica.
– Cassette: ¿Cuánto tiempo estuvieron en gravedad cero y cómo fue tu percepción del tiempo en esos momentos?
– Juan José: Fueron 10 parábolas de 30 segundos. Empiezas a sentir algo que nunca has sentido, a lo cual tu cerebro se vuelve muy atento a cada segundo, porque si tus líquidos iban de arriba para abajo o de izquierda a derecha en ese momento no porque todo tu cuerpo tiende a hacerse esférico, tu hígado ya no pesa, los huesos del oído flotan y vibran de una manera distinta y todas esas señales llegan al cerebro al mismo instante, entonces el cerebro tiene que generar distorsiones o mutación fisiológica para establecer un nuevo campo de información, lo pone en alerta de una sensación que nunca habías vivido.
– Cassette: ¿Para ti qué sensación fue el vivirlo por primera vez?
– Juan José: Es una mezcla de sentimientos porque en el comienzo del vuelo yo lo califiqué como una experiencia “aterradora”, entonces aterradora en sus raíces es sin tierra, por un momento estás viviendo gravedad cero pero cuando el avión remonta la altura, estás sintiendo una sensación de doble gravedad, es una mezcla de sentimientos muy fuerte, es un poco el imaginario que traías versus la realidad, entras en esa realidad donde dices “obvio en dónde me metí”, y de repente llegas y empiezas a sentir algo que nunca has sentido y distorsiona tu manera de sentir, distorsiona tu manera de pasar del tiempo y eventualmente a mí me tocó enfermarme en la quinta parábola, hubo quien se enfermo en la séptima parábola, vas en un proceso donde tu cuerpo ya no aguanta eso y te enfermas mal.
– Cassette: ¿Cuales son los síntomas de enfermarse de falta de gravedad?
– Juan José: Con lo que puedo generar un paralelo es: un mal de montaña.
– Cassette: ¿Si pudieras resumir la experiencia de volar en gravedad cero, cómo lo describirías?
– Juan José: Imagínate volar, todo lo que significa volverte a sorprender, volver a ser niño, volver a sentir, date cuenta que a los 53 años hay muy pocas cosas que te sorprenden ya tienes una capacidad de experiencia, ya viste amaneceres y atardeceres e imagínate a los 53 años generar una experiencia de algo nuevo con capacidad de asombro y con capacidad de emoción.
– Cassette: ¡Dan muchas ganas de vivirlo!
– Juan José: Efectivamente es algo que la gente debería desear vivir, es volverte cuerpo celeste es entender lo que es viajar en el universo.
– Cassette: Es bastante poético.
– Juan José: Lo que pasa es que es distinto que si te lo narra un físico, un piloto o un poeta, al final de cuantas todas las experiencias y la vida es un problema de como narrarla.
Yo lo único que le recomendaría a cualquier persona que le platique esta experiencia es que merece la pena desearla y hacerlo.
– Cassette: ¿Qué quieres que se lleven las personas que visitan la exposición?
– Juan José: La exposición es la excusa para hacer esto, es un rastro de la experiencia más que la experiencia, para mí los procesos de haber volado y la exposición y lo que la gente va a hacer en la exposición ya no sé si van a ser una misma cosa, para mí el volar es una necesidad espiritual, la exposición es un problema de oficio, es una responsabilidad transmitirlo, plasmarlo, generar un objeto, completarlo con el público o con la gente, es muy difícil mi visualización del otro lado, más que generar algo voy a encontrar algo, cuando yo vea a la gente visitando la obra o comentando la obra o generando el dialogo con la obra voy a encontrar qué es lo que hice. Es como escuchar lo que dijiste sin estar muy seguro de lo que dijiste. El sentido del hacer es generar resonancia.
– Cassette: ¿Hacer un viaje podrías decirlo que es algo que no puedes transmitir a pesar de que lo cuentes con palabras, o que lo veas en una pantalla?
– Juan José: Hay diferencias entre ser viajero y ser turista, el turista es el que se toma fotos con un monumento, el que más bien lo que hace es hacer un acto presencial. El viajero; es ir en la poética de lo que suceda, si suceden bien o si suceden mal o son lentas las cosas, si no es lo que esperabas… el turista tiene esa necesidad de que las cosas salgan bien, el viajero es feliz con lo que suceda.
– Cassette: Hay un dicho, que hace referencia a que “uno no regresas siendo el mismo después de un viaje”, ¿tú cómo sientes que aplica?
– Juan José: A mí definitivamente la experiencia me cambió la vida, la suma de viajes te cambian la vida porque te dan mundo, al final es una patina distinta que te queda sobre la piel, el tener mundo es una manera de obtener una conciencia de planeta o de la nave tierra que no la puedes aprender de los libros o el estudio. El estudiar, el verlo por televisión es una referencia a la calidad y viajar es la calidad y saber viajar es cualitativo.
– Cassette: Juan José muchas gracias por la entrevista, algo que quieras compartir a los lectores.
– Juan José: Si tienen la oportunidad visiten la exposición, véanla y reflexionen en el proceso.
Después de responder cada una de las preguntas que le hicimos a Juan José tuvimos la oportunidad de visitar la muestra, la cual podemos asegurar que hay que visitar, encontramos en ella la curiosidad lúdica presente en cada una de las piezas que intenta crear una reflexión, a base de los juegos, sueños, curiosidades y sentimientos de cada uno de los artistas presentes. La exposición estuvo hasta el 22 de marzo en el Laboratorio Arte Alameda. Ya partió a Rusia, Eslovenia, Texas y regresar primeramente a la frontera mexicana (por Manuel Cosío)