Va-Brasil (por Lucas Alamo – Onself Records – name your price)
Compilación lanzada al mundo por Onself Records, en la que siete artistas de distintos países toman el GEN del carioca funk y lo llevan a diversos lugares musicales.
Hay personas que no paran jamás, que a cada rato se están involucrando con nuevos proyectos y que siempre tienen la mirada puesta en el futuro, en la creación novedosa. Hay gente que se mueve siempre entre las sombras de la experimentación, formulando desde el underground las notas que determinarán los fundamentos de lo que en los próximos años será considerado “tendencia”. Entre esos personajes se encuentra el michoacano Kryone, quien ahora, junto a una corte de poderosos productores de distintas ciudades de Francia y Brasil, como Cardosou, JLZ, Petit Piment, Sunson, Toulth, Yozu y Vhoor, ha dado pie a un nuevo proyecto que promete mucho más que sólo música experimental.
Onself es una plataforma enfocada en promover el arte y la música, con un muy fuerte y definido enfoque a los beats de corte futurista. Sin embrago, el simple termino de futurista se queda bastante corto cuando intentamos comprender lo que sucede en su primer compilado, el cual, a manera de presentación en sociedad, fue liberado desde su cuenta de bandcamp en abril de este año bajo el nombre de “Brasil”.
En esta compilación se reunió el trabajo de 7 artistas quienes abordan el baile funk desde diferentes ángulos, dándole nuevas y frescas reinterpretaciones a este ritmo que, hoy por hoy, ya es un elemento clave del sonido brasileño, al menos de Río de Janeiro.
Abriendo el álbum, nos encontramos con “Envolvente”, un track bastante minimalista y soñador, profundo y cadencioso que sirve perfecto de apertura, para seguir con “Sequencia”, donde el ritmo brasileño se acerca mucho más al footwork, ocasionando algo que podría ser llamado baile work (¿o foot funk? …. ¡venga pónganse creativos!). “Kika” es un trap veraniego, como para la pista de baile con vista al mar, donde la música se mezcla con los aromas tropicales de hierba y sudor. “Ocitocina” es una bomba de poder; aquí hay una vibra cósmica y una tensión que desembocan con drops pesadísimos a lo más gangsta trap, y un hip hop futurista que no invade el baile funk, sino que lo muta desde adentro. En “vai que vai” nos topamos con una versión más ralentizada de del baile funk que va de la mano con una especie de post trap (¿quizás un post-post trap?) oscurón pero fresco. “Realidade” nos deja a tono con unos future beats donde resulta obvia la influencia del hip hop pero que se ve nutrida por el calor del barrio tropical. Y cerrando el álbum, “3x amor”, es también una migración de los sonidos juke de Chicago, aterrizados en la tropicalidad total, con bajos poderosos por todos lados, y una inevitable invitación a abordar la pista de baile con todo el estilo.
Por supuesto, nuestra sugerencia total es que sigan este proyecto de cerca, que habrá mucho material de cada uno de sus integrantes. Y para no variar, bajen el disco y si les gusta la propuesta, colaboren donando algunos billetes (por Lucas Alamo)