Un robot pintor convierte las imágenes de tus sueños en arte (por Manuel Cosío)
“La interpretación del sueño es la vía regia hacia el conocimiento de lo inconsciente” Sigmund Freud
La cadena de Hoteles Ibis,dicen sus huéspedes, se caracteriza por brindar una buena experiencia: servicio rápido, decoración decente y excelente ubicación. Pero al parecer nada es suficiente cuando se trata de complacer a los clientes más exigentes con productos no necesarios pero deslumbrantes.
La última apuesta de los hoteles podría caracterizarse un poco como excéntrica, pero no por ello menos interesante: ofrecen un robot que pinta los patrones de sueño de sus huéspedes.
Los hoteles que contarán con el robot se encuentran en las ciudades de París, Berlín y Londres.
El proyecto se hace llamar “Sleep Art” (Arte del sueño). Le tomo a más de 100 personas 6 meses de trabajo y 50mil líneas de código para que el robot artista estuviera completo. Para ser más específicos, se compone de un brazo robótico industrial ABB y un colchón equipado con 80 sensores.
Durante la noche, mientras la persona duerme, los sensores recolectan datos sobre la posición y movimiento de ésta, así también de la temperatura y los sonidos. De está forma, a partir de algoritmos, toda la información es traducida a pinceladas con una paleta de cuatro colores que el robot plasma sobre un lienzo.
Una vez que la máquina a terminado su trabajo, sus interpretaciones se caracterizan por ser elegantes, a veces con geometrías marcadas que se asoman entre los trazos. Otras ocasiones las formas asemejan luces, flores, o incluso insectos. Lo mejor es que si se quiere tener el retrato de nuestro sueño y se cuenta con el tiempo, el dinero, y las ganas de gastarlo, sólo basta con ir y alojarse en los hoteles de las ciudades sedes.
Al final, qué experiencia seria tener el retrato de esos sueños especiales, aquellos lindos, aquellos marcados por personas o eventos que nos han perturbado, o incluso los que son recurrentes, esos que aparecen una y otra vez.
La interpretación abstracta y surrealista de un robot sobre nuestro mundo onírico, lista para colgar en las paredes de la casa.