Se acerca diciembre, y mucha gente en todo el mundo habla y se preocupa con el supuesto Apocalipsis.
Diversos inventores y creativos de distintos lugares del planeta vienen proponiendo desde hace un tiempo ya, alternativas para sobrevivir a catástrofes naturales, altos niveles de radiación, etc.
Entre todas las propuestas que hay, hoy veremos dos: Una de una empresa estadounidense y la otra de un empresario chino.
Una empresa de Estados Unidos publica en su página web varios modelos de búnkeres para enterrar en el jardín de la casa. Estas mini casitas subterráneas van de los U$18.000 y U$78.000 en sus modelos estándares, y constan de un tubo metálico completamente equipado y aislado para que una familia tipo pueda sobrevivir sin salir a la superficie terrestre por varios días.
Además de incorporar en su diseño muebles como mesa, sillas, sillón, t.v., camas (una matrimonial y cuatro individuales) mueble de cocina, pileta de lavado y baño, estos tubos pueden contener detectores de radiación, radio, paneles solares para la captación de energía, reserva de tanques de agua y combustible, cámaras hacia le exterior y una pequeña salida camuflada con el entorno.
Otras opciones como baño químico, baño eléctrico con tanque de retención bicicletas fijas para hacer ejercicio generando energía y hasta jacuzzi son posibles de pedir junto con el tubo para tener una estadía más “placentera” durante el tiempo que se permanezca dentro del mismo.
El valor puede elevarse hasta precios de más de U$1.000.000
Muchos ya han comprado e instalado su Atlas en el patio de la casa.
Por otro lado, más precisamente en China, Yang Zongfu asegura que va a salvar muchas vidas durante el fin del mundo con la reciente propuesta que dio a conocer.
Se trata de una esfera de cuatro metros de diámetro y seis toneladas de peso, equipada con un asiento seguro y sistemas de observación hacia el exterior y ventilación, aislada y preparada para resistir desastres naturales, radiación, temperaturas altas, o choques bruscos.
Yang las bautizó como “Arcas de Noé” y cuenta que las mismas han sido más que probadas. Hace poco tiempo, para demostrar su afirmación, se lanzó por una montaña a 50 metros de altura terminando su veloz recorrido de prueba en un lago al pie del monte.
La primera de estas pelotas habitables fue presentada en agosto de este año, luego de que Zongfu se pasara dos años en construirla e invirtiera en ella 240.000 dólares.
El precio de estas bolas adaptables según el gusto y las necesidades de cada cliente, es de 5 millones de yuanes (800.000 dólares). Por más caro que pueda parecer, ya hay varios interesados en estas burbujas, me manera que Yang tiene muy poco tiempo para prepararlas y entregarlas a aquellos compradores que están esperando el próximo 21 de diciembre con incertidumbre y miedo.