Hombre bate record al subir 103 pisos con una pierna biónica (video – por Manuel Cosío)
Gracias a los avances en las prótesis biónicas, poco a poco las personas que han perdido alguna extremidad o sufren de alguna especie de parálisis, tienen la esperanza y la cercana posibilidad de recuperar de alguna forma la movilidad de su cuerpo.
Este tipo de desarrollos, como todo, tiene sus lados buenos y sus lados malos.
Por un lado, en su mayoría son financiados por industrias militares. Pero por otro, y es en el que nos centramos hoy, permiten reintegrar a la sociedad a las personas que habían perdido algo tan valioso como puede llegar a ser en algunas ocasiones el poder valerse de sí mismos. Para citar un ejemplo, podemos recordar el caso de la mujer parapléjica que pudo tomar una bebida por ella misma, auxiliada de un robot que respondía a los estímulos de su cerebro.
Hoy les traemos el caso de Zac Vawter, quien se convirtió en la primera persona en subir 103 pisos por la escalera, usando una pierna robótica controlada con la mente. La prótesis usa una tecnología que permite conectar los nervios que fueron cercenados en la amputación con otros músculos útiles. En el caso de Vawter, los nervios que normalmente controlaban la parte baja de su pierna fueron conectados a su tendón, cuyos impulsos eléctricos son convertidos en señales que permiten mover la prótesis.
La primera de estas prótesis biónicas, llamadas “mioeléctricas” (que pueden leer los de impulsos eléctricos en los músculos a través de electrodos y traducirlos por medio de procesamiento computacional en movimiento), fue lanzada en 2005 en el Centro de Medicina Biónica del Instituto de Rehabilitación de Chicago. El primer paciente fue Jesse Sullivan, que obtuvo un brazo que podía controlar con sus pensamientos.
El mismo centro, ahora trabaja en conjunto con la Universidad de New Brunswick, Universidad de Vanderbilt, el MIT y la Universidad de Rhode Island en la prótesis de pierna de Vawter.
El proyecto está siendo financiado por el Centro de Investigación de Telemedicina y Tecnologías Avanzadas del Departamento de Defensa de Estados Unidos.
La pierna de Vawter costó USD$ 8millones, pesa 4,5 kilos, y utiliza dos motores que le permiten moverse a la rodilla y el tobillo separadamente.
Dice Vawter: “Con una prótesis normal tengo que tomar cada escalón con mi pie bueno primero y luego como que arrastrar o levantar la prótesis. Con la pierna biónica es simple, subo las escaleras como lo hacía antes, y hasta puedo subir dos peldaños de una vez”.
La escalada de la Willis Tower de Chicago le tomó 53 minutos y 9 segundos, sin duda todo un éxito.
Así es como un hombre que había perdido su pierna hoy sube un rascacielos con su extremidad biónica.
Quién sabe cuales alturas seremos mañana capaces de alcanzar. (Vía Fayerwayer)
Gracias a los avances en las prótesis biónicas, poco a poco las personas que han perdido alguna extremidad o sufren de alguna especie de parálisis, tienen la esperanza y la cercana posibilidad de recuperar de alguna forma la movilidad de su cuerpo.
Este tipo de desarrollos, como todo, tiene sus lados buenos y sus lados malos.
Por un lado, en su mayoría son financiados por industrias militares. Pero por otro, y es en el que nos centramos hoy, permiten reintegrar a la sociedad a las personas que habían perdido algo tan valioso como puede llegar a ser en algunas ocasiones el poder valerse de sí mismos. Para citar un ejemplo, podemos recordar el caso de la mujer parapléjica que pudo tomar una bebida por ella misma, auxiliada de un robot que respondía a los estímulos de su cerebro.
Hoy les traemos el caso de Zac Vawter, quien se convirtió en la primera persona en subir 103 pisos por la escalera, usando una pierna robótica controlada con la mente. La prótesis usa una tecnología que permite conectar los nervios que fueron cercenados en la amputación con otros músculos útiles. En el caso de Vawter, los nervios que normalmente controlaban la parte baja de su pierna fueron conectados a su tendón, cuyos impulsos eléctricos son convertidos en señales que permiten mover la prótesis.
La primera de estas prótesis biónicas, llamadas “mioeléctricas” (que pueden leer los de impulsos eléctricos en los músculos a través de electrodos y traducirlos por medio de procesamiento computacional en movimiento), fue lanzada en 2005 en el Centro de Medicina Biónica del Instituto de Rehabilitación de Chicago. El primer paciente fue Jesse Sullivan, que obtuvo un brazo que podía controlar con sus pensamientos.
El mismo centro, ahora trabaja en conjunto con la Universidad de New Brunswick, Universidad de Vanderbilt, el MIT y la Universidad de Rhode Island en la prótesis de pierna de Vawter.
El proyecto está siendo financiado por el Centro de Investigación de Telemedicina y Tecnologías Avanzadas del Departamento de Defensa de Estados Unidos.
La pierna de Vawter costó USD$ 8millones, pesa 4,5 kilos, y utiliza dos motores que le permiten moverse a la rodilla y el tobillo separadamente.
Dice Vawter: “Con una prótesis normal tengo que tomar cada escalón con mi pie bueno primero y luego como que arrastrar o levantar la prótesis. Con la pierna biónica es simple, subo las escaleras como lo hacía antes, y hasta puedo subir dos peldaños de una vez”.
La escalada de la Willis Tower de Chicago le tomó 53 minutos y 9 segundos, sin duda todo un éxito.
Así es como un hombre que había perdido su pierna hoy sube un rascacielos con su extremidad biónica.
Quién sabe cuales alturas seremos mañana capaces de alcanzar. (Vía Fayerwayer)
