Justin Bardales-Benares (por Andrés Asia – name your price)
Locura y desenfreno. Mezcla imposible de sonidos y tendencias musicales. Explosión de los sentidos. De todo esto trata este inclasificable álbum.
Si en un género musical hay vida para rato y espacio para explorar, seguro esa es la música de cámara, la también llamada música contemporánea, en cruza con cualquier otro estilo. Ese es un género que siempre sonará vivo, orgánico, y eso se debe en gran parte a la “realidad” que aportan los instrumentos acústicos, y más si son ejecutados en vivo; como es el caso de lo que suena en este disco que hoy les presento, titulado “Benares”, obra del compositor y multi instrumentista norteamericano Justin Bardales.
Este californiano, que es parte del California Institute of the Arts, ha sacado a la luz el pasado otoño del 2017 un disco grabado en vivo con orquesta, dirigiendo su sonido enteramente en vivo, grabado en el mismo instituto.
En el disco, Bardales nos lleva de paseo por oriente, india y diversos lugares, sumergiéndonos en paisajes ricos de imágenes, sonidos, aromas y luces. Con “Benares” lleva nuestros oídos de visita guiada al palacio de Shiva, propone mediaciones psicodélicas, nos seduce con homenajes a la diosa Ganga, como hace referencia en el segundo y tercer track del disco; creando fusiones entre jazz, música contemporánea Indú, mezclando instrumentos como la tabla con otros procesados.
El disco plantea un safari al interior de la mente en busca de redención. Nos incita a que seamos turistas de ningún lado, y a su vez recrea el tráfico caótico de las Calles de cualquier ciudad de la India, rindiendo tributo a los dioses. Justin Bardales hace aplaudir, exorcizar, toser a sus músicos adrede, como parte de la obra, con tiempos desfasados, bocinas, mercaderes, galopes de animales, rituales, inciensos, barbas largas, elefantes, niños correteando, caos universal y una frescura contundente. Minimalismo en cuerdas que cobijan, con muy buen trabajo en las pausas, crescendos, noise, clusters, silencios. Y hasta se da el gusto de incluir guitarras procesadas, pianos rodhes interestelares, órganos lisérgicos, baterías languidecientes, osciladores, barridos y un más que basto abanico sonoro. Como si los Sun-Ra fueran a almorzar comida oriental luego de asistir a misa.
“Benares” propone una cósmica ceremonia que incita a zambullirse al ritual de total entrega de los sentidos en busca de redención, pero sin perder su buena cuota de misterio.
Gran segundo disco del joven compositor Bardales en forma de trip que explota en el cerebro, con un representativo arte de tapa, especial para los curiosos y soñadores que asoman los oídos más allá de la hegemonía de los sonidos digitales y las tendencias de redes zoociales (por Andrés Asia – Sonido Atmosférico Ediciones)
