Lucas Totino Tedesco-La guerra suave (por Andrés Oddone – name your price)
Somos descarnados fans, así sin tapujos, de la música de Lucas Totino Tedesco. Es importante aclarar eso antes que nada, como para dejar en claro que lo nuestro ya está teñido de cierta subjetividad, y que desde ese lugar llegan las palabras que podrán leer a continuación.Desde que escuchamos por primera vez “Si yo fuese un perro“, el que es su álbum anterior, algo notamos de especial, lo cual no es en verdad ningún mérito de nuestra parte, por que claramente lo de Lucas involucra mundos tan distintos, tan difíciles en encontrar todos juntos en un solo lugar, que invita a un análisis que va exponiendo capas y capas nuevas con cada nueva escucha. Y en ese transcurrir que tiene tanto del gozo del encuentro como de la magia de la sorpresa, fue que “Si yo fuese un perro” llegó a ocupar un lugar de los buenos dentro de nuestro catálogo mental de discos importantes en la escena indie latinoamericana de los últimos años.
Con toda esa historia a cuestas, y con una escalera difícil de continuar (por que no digan… que difícil escuchar con apertura y desprejuicio un nuevo disco de un artista que ya nos enamoró alguna vez con otra música), es que estamos de a poco encontrándonos con este nuevo amigo que es “La guerra suave”, el nuevo álbum de Lucas, que sale a la luz en este comienzo del 2015.
Gustar, gustó a la primera escucha, y gustó mucho. Pero lo que es más importante, logra interesar cantidad, y deja espacio a algo bello. Por que al igual que ocurrió con “Si yo fuese un perro” se adivinan los distintos momentos que propondrá la escucha de este álbum, promete cantidad de descubrimientos que llegarán en situaciones diferentes: hilos de sorpresa con auriculares en medio de un viaje en autobús. Emociones punzantes en la ruta, con el paisaje pasando a los costados como en una película. O así, escuchándolo y escribiendo, haciendo cualquier tarea que necesite de sonidos compañeros, dejando que esta música indefinible e irreal llene los poros de la inspiración necesaria para que el ente que reside en el pecho despliegue sus colores.
Es de esos discos que proponen múltiples lecturas, tantas como los lugares que transita, que son muchos, con tanto de pop como de ímpetu songwriter, de experimental como de directo y emotivo, de world music como de volátil e instrumental.
Que bueno que siga saliendo al mundo música que empuja el cuerpo hacia lugares nuevos (por Andrés Oddone)