Ramón Chicharrón-Pescador de sueños (x Pablo Borchi)

El nuevo disco de Ramón Chicharrón nos lleva de paseo en una gira mundial a los saltos, porque al final, la vida es un carnaval.

“Pescador de sueños”, nuevo álbum de Ramón Chicharrón, parece indicar que Montreal, el lugar en el que este artista actualmente vive, es el espacio ideal para el desarrollo del nuevo sonido latino alternativo. No sabemos exacto que será, pero al escuchar “Pescador de Sueños” da la impresión que hay algo en ese lugar del mundo que habilita las condiciones necesarias para que este disco proponga un punto medio entre distintas facetas de la música del mundo, la escena underground y el sonido club radial del momento.
A través de de los 10 tracks de este álbum, Ramón Chicharrón transmite una identidad latina súper conectada con la raíz negra de Colombia, su país de origen, que de una manera fresca y moderna se dá al tú por tú con artistas como Carlos Vives, Bomba Estéreo o Choc Quib Town. Además de un sonido rico, impecable y muy musical, cada track es un coro andante de buena onda, como para convertirlo en el nuevo soundtrack del home office.
El disco abre con “Apretao”, una colaboración con Boogát, artistazo amigo que también se encargó de la producción del álbum, que a partir una guitarra con tintes de bossanova y una percusión de sabor bahiano crea un hip hop muy tirado para atrás, que nos recuerda a Féfé de Saïan Supa Crew. Tan solo con ese inicio podemos darnos cuenta que la multiculturalidad de Montreal y las influencias del mundo francófono (tanto de Francia como del Caribe y África), elementos que dan a este álbum un sonido muy especial.
“Mi Querer” es un track que une la champeta con el afrohouse más actual, con la sensibilidad feel good / nostálica de los primeros discos de Quantic. Este es hit para la pista si o sí.
“Que se vayan las penas” es una canción de fogata con djembe y canto al alma, con ese lick de guitarra que dejarían a varios amantes del indie folk con una sonrisa en la cara.
“Soy de Aquí” es la primer parada por la cu-cu-cu-cu-cumbiaaaaaaaaaa. Esta va con una guacharaca que despide dub y raggamuffin por varios lados, y usa las gaitas colombianas como si fuera la melódica con delay de Augustus Pablo. Este es ese track que Glen Red o Jeremy Sole tocarían para empezar una noche en la icónica fiesta “Afro Funke”, en Santa Mónica. Inclye colaboración de Zalama Crew & Vox Sambou.
“Sol” me recordó mucho a los bossa novas / salsas baladas de Los Amigos Invisibles. Sabor latino tranquilo, pero con alma funky. Una canción de amor roto y atardecer, que sirve de buena bajada antes de llegar a uno de mis momentos favoritos del disco.
“Caerse Más de una Vez” es un son montuno que lleva una batería de hip hop old school, al estilo del Greenwood Rhythm Coalition. Este track me encantó, porque demostró que esos dj tools de salsa / son con beat de hip hop pueden transformarse eventualmente en una canción contagiosa que le puede gustar inclusive a tu mamá.
“Recuerdos” es otra parada especial en el disco que nos recuerda que la música del mundo de Ramón Chicharrón no es folclorismo, sino innovación latina alternativa. Esta canción tiene un tempo y uso de melodías de recortes de voz re-pitcheados muy cercanos al future bass / space trap. Sin embargo, el resto de la composición contiene los sonidos de la música del mundo, lo que lo convierte en un track único, una gran síntesis de la identidad migratoria y la modernidad de Montreal. La voz de Djely Tapa pone uno de los puntos altos de emotividad en el álbum.
“Bombero” es otro de los grandes hits del álbum, una canción que bien se la podríamos haber escuchado a Juanes y Mon Laferte en el top 40 la semana pasada, que a su vez es fiel al arrabal latinoamericanista. En este track, el verso de cumbia revienta después con un coro de dembow y salsa muy al estilo de los Caseroloops de Venezuela, a prueba fallas, inclusive ante cualquier bailador tímido.
“Pescador” estira una patada voladora de champeta / África en el disco. Si bien “Mi Querer” había logrado algo muy especial al combinar este género con el afrohouse y la vibra Quantic, “Pescador” es alegría pura. Esta sí que es una canción que mete un rayo de sol a cualquier invierno nórdico. Esta va a mi alarma de despertador de inmediato. Cuenta con la colaboración de Zalama Crew y la guitarra precisa de Aboulaye Koné.
Para cerrar el disco Ramón Chicharrón entrega “Atardecer”, un track que transmite el bajón de energía del fin del día mientras la nostalgia se empieza a acercar al fondo de la cabeza poco a poco. Es una canción que funciona muy bien para aterrizar el disco y conectar con el “saudade” del track inicial “Apretao”, lo que hace que este disco se convierta en un loop perfecto, un gif musical que dan ganas de dejar sonando sin parar.
Cabe mencionar que la producción que hace Boogát (artista amigo que adoramos en Cassette Blog) de “Pescador de sueños” es de un alto nivel, delicada. Mezcla lo electrónico con los instrumentos tradicionales con gran maestría, al punto que conviven como si hubieran salido del mismo centro sonoro. Boogát lleva muchos años innovando en la escena de la world music alternativa en Montreal y el mundo. Nos da gusto ver cómo todo ese largo recorrido de Boogát y su bagaje se transmite en este lindísimo álbum de una manera muy propia (por Pablo Borchi)

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